En un contexto global marcado por la urgencia climática, LATAM enfrenta un desafío crítico en materia de finanzas sostenibles llegando a números rojos, esto a pesar de los esfuerzos internacionales por promover la transición hacia una economía baja en carbono, pues un reciente informe revela que la región aún no logra alinear adecuadamente sus presupuestos con la emergencia climática.
LATAM en números rojos dentro de las finanzas sostenibles
Según el Índice de Finanzas Sostenibles, ninguno de los 20 países latinoamericanos analizados ha alcanzado niveles satisfactorios de financiamiento sostenible, además de manera preocupante, se observa una marcada disparidad entre los recursos asignados a actividades intensivas en carbono y aquellos destinados a iniciativas sostenibles. En conjunto, los países de la región han destinado apenas 1.690 millones de dólares a presupuestos sostenibles, mientras que los recursos para actividades intensivas en carbono ascienden a desorbitantes 62.424 millones de dólares.
El índice de finanzas sostenibles
El Índice de Finanzas Sostenibles evalúa cuatro aspectos clave: los ingresos sostenibles de cada país, los ingresos intensivos en carbono, el presupuesto asignado a la sostenibilidad y el presupuesto destinado a actividades intensivas en carbono, este enfoque integral permite comprender la compleja dinámica financiera de la región y su relación con la crisis climática.
Ranking de Finanzas Sostenibles en América Latina
El informe revela un panorama heterogéneo en la región, con países como El Salvador, Guatemala y Jamaica liderando el camino hacia la sostenibilidad, mientras que naciones como México, Uruguay y Trinidad y Tobago enfrentan importantes desafíos en la gestión de sus finanzas. La dependencia de recursos petroleros y la falta de inversión en iniciativas climáticas emergen como factores determinantes en la clasificación de los países.
Desafíos futuros
El Índice de Finanzas Sostenibles proporciona una oportunidad única para reflexionar sobre las brechas existentes en las políticas financieras de la región. Es fundamental que los países latinoamericanos reconozcan la importancia de alinear sus presupuestos con los objetivos climáticos globales y promuevan la inversión en actividades bajas en emisiones, pues este enfoque no solo contribuirá a mitigar los impactos del cambio climático, sino que también impulsará el desarrollo económico y social sostenible en toda la región.
América Latina se encuentra en un punto crítico en su camino hacia la sostenibilidad financiera. El desafío de reorientar los presupuestos hacia iniciativas climáticas representa una oportunidad para liderar la transición hacia una economía resiliente y baja en carbono, por lo que es fundamental que los gobiernos, la sociedad civil y el sector privado trabajen en conjunto para superar esta brecha y construir un futuro más próspero y sostenible para todos.