A diferencia de lo que muchos sugerirían, los expertos advierten que la contaminación lumínica está empeorando en medida que masifica el uso de la leces led. Sin duda, puede provocar un mayor impacto biológico en el planeta.
Este tipo de contaminación amenaza la oscuridad en gran parte del mundo y el desarrollo natural de especies vegetales, animales, e incluso humano. Así como la luz natural, la oscuridad también es una parte primordial en las jornadas.
Un grupo de científicos europeos y estadounidenses realizaron un estudio, publicado en la revista Science Advances. En este dieron a conocer a través de imágenes satelitales Suomi de áreas al aire libre e iluminadas artificialmente, que la Tierra brilla más que nunca debido a la contaminación lumínica que, desde 2012, aumenta un 2.2 por ciento cada año.
Con este estudio, se comprueba que la contaminación lumínica ha aumentado de manera alarmante y puede empeorar debido al incremento del uso de diodos emisores de luz o luces LED, por sus siglas en inglés, que por un lado tienen la ventaja del ahorro energético y económico, pero para el planeta y sus habitantes no hay tantas ventajas como se suele pensar y fomentar.
La tasa de crecimiento del uso de luces LED es más veloz en países en desarrollo que en los países ya desarrollados iluminados con diferentes tecnologías. Los investigadores aseguran que el motivo del aumento de cantidad de luz se debe a la mala utilización de las bombillas LED, pues a pesar de la revolución de esta tecnología que supondría por ser más eficiente y barata, está provocando un efecto de rebote.
Asimismo ha habido un descontrol pues se ha promovido el cambio de focos tradicionales a bombillas de sodio con LEDS, lo cual se ha hecho sin un previo análisis de la iluminación adecuada y suficiente para cada sitio, desde casas hasta lugares públicos en los que antes se utilizaba un solo foco que se sustituyó por tres leds sin tomar en cuenta la medición de la intensidad de la bombilla.
Los científicos aseguran que las consecuencias de estas acciones no sólo significan noches más iluminadas que nos impiden ver el manto estelar, este tipo de contaminación también tiene graves efectos en el medio ambiente, en los animales y en las personas.
En las especies animales hay afectaciones como su migración natural, la reproducción de las aves y peces, así como la alteración de especies nocturnas.
En las personas hay alteraciones relacionadas con el ciclo del sueño. Este desequilibrio producido por las fuentes de luz a toda hora se denomina “descincronía circadiana”, y este efecto altera los sistemas cerebrales reguladores del metabolismo, causando el riesgo de aumentar de peso, desarrollar diabetes u obesidad.
Con todo esto, los gobiernos tendrían que regular las políticas del alumbrado, ya que se relaciona directamente con las emisiones de CO2 y la huella de carbono, las cuales sí son regularizadas.
Una alternativa para la disminución en el gasto de luz son los paneles solares, los cuales dependen del sol, ayudan a tu economía y no dañan al planeta. Si estás interesado en este sistema, recurre a Suncore y analiza tus opciones.
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